Venezolano come más pollo y frutas, y menos de todo lo demás desde 2012

Venezolano come más pollo y frutas, y menos de todo lo demás desde 2012

 

Regresó rápidamente a almorzar a su casa, antes de volver al trabajo, al liceo o la universidad. Le sirvieron arroz con pollo y tajadas, jugo de lechosa y un cambur. Su desayuno había sido una arepa con carne molida.

Arroz con pollo

Arroz y pollo han superado las cantidades diarias de harina de maíz que consume el venezolano
Fuente: Wikipedia

Así podría ser un día cualquiera en la dieta del venezolano según la Encuesta de Seguimiento al Consumo de Alimentos que realiza el Instituto Nacional de Estadísticas en todo el país, que mide el promedio de gramos consumidos a diario, según las comidas preparadas. Los rubros medidos son aquellos que conforman la Canasta Alimentaria. Los datos van desde el segundo semestre de 2003 al primero de 2014 y enfocado en 20 mil 670 viviendas de todo el país y los estratos sociales, como revela su Ficha Técnica.

El INE permite consultar los diez alimentos más consumidos durante el I Semestre de 2014 (que va el 30 de marzo al 30 de septiembre) bajo el renglón “mayor consumo aparente diario por persona”. En el mismo se revela que el pollo se alzó como principal alimento llegando a una porción promedio de 74 gramos en el plato del venezolano. Le sigue el arroz (52 gr), plátano (52 gr), harina de maíz (51 gr) y carne de res (45 gr). La lista la completa lechosa, el cambur, pan de trigo, pasta alimenticia y patilla (32,5 gr), en ese orden.

Cinco de estos , mientras se calcula que para quienes tienen alguna condición que les impide comer arroz, pasta o harinas sin gluten, así como otros tipos de regímenes especiales de alimentación, la Canasta Alimentaria podría ser 800% más cara.

 

 

Comemos menos

Los cambios más sensibles están al cruzar los datos de las porciones diarias promedio entre el segundo semestre de 2003 y el primero de 2014. Después de un crecimiento paulatino -con la llegada de la Misión Mercal– hasta el primer semestre de 2012, en el segundo semestre de ese año empezó un descenso progresivo.

El venezolano comía en 2014 menos arroz, carne de res, carne de cerdo, pan de trigo, azúcar, avena, el resto de las verduras y tubérculos, tomate, cebolla, pimentón y zanahoria, pescado, atún y sardinas en latas, aceite, queso blanco, aceite, margarina y mayonesa que en 2003.

Los únicos alimentos que muestran crecimiento son lechosa, cambur, patilla, mango, melón, piña, jamón y queso amarillo, así como el apio, la lenteja y el pollo.

Pollo en vez de arepa

El cambio principal en la dieta en los 12 años medidos por el INE está en el centro como principal alimento del venezolano. La harina de maíz dejó de serlo desde 2006 para dar paso al pollo.

El llamado “pan del venezolano” pasó de porciones de 88 a 90 gramos diarios en 2003 a 52 gramos para 2014. La reducción fue paulatina hasta el 2011, cuando repuntó cerca de lo que se comía en 2003, para entonces caer más dramáticamente a principios de 2013, cuando se redujo un 20% en seis meses, para un descenso total de 42% en 12 años. Así informa la Encuesta de Seguimiento de Consumo de Alimentos del INE.

El carne de ave de corral también tuvo un mejor posición que la actual, cuando a principios de 2012, se ubicaba en casi 85 gramos diarios de consumo. Un par de años luego bajó hasta 74, pero indiscutiblemente en el primer lugar del consumo del venezolano.

Esto significa que un venezolano -en promedio- comía a inicios del 2014, más de 2 kilos 200 gramos de pollo y poco más de kilo y medio de harina de maíz cada mes.

Socialismo alimentario

Haciendo una revisión de lo más comido por estrato social según el INE, para el 2014 hay un logro de la equidad social: nueve de los diez alimentos más consumidos, son compartidos por todos los estratos sociales. El pollo en la cumbre. Pero todavía los más pobres consumen cantidades más altas de arroz, pasta y azúcar, mientras menos de carnes de res. Los más pudientes comen más lechosa y tienen la papa como diferencia.

Algo diferente al principio de 2013. Según el INE, los estratos I, II y III tenían entre sus alimentos más consumidos diariamente el melón, la leche líquida completa y la patilla. Seis meses más tarde, estos fueron sustituidos por mayores frecuencias de pasta, pan de trigo y papa.

Si retrocedemos hasta 2003, las dietas no eran tan similares entre distintos estratos como las actuales, aunque las porciones promedio fuesen mayores. Entonces, el pollo era el quinto alimento de los menos pudientes pero comían más pescados y naranjas que las clases de mayores ingresos.

Como ahora, el estrato V consumía más arroz, pasta y azúcar para complementar su nutrición, y los más ricos tenían la leche pasteurizada entre sus diez más consumidos. Entonces, también los más ricos se alimentaban con cantidades mayores de lechosa.

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