Se acerca el Día Mundial sin autos
Finalmente estamos cerca de un día muy importante para quienes queremos hacer un aporte tangible de conciencia colectiva por nuestro planeta, nuestro ambiente y nuestra ciudad desde nuestra propia individualidad. En esta oportunidad los y las ciclo-activistas nos estamos preparando para otra rodada masiva que no solo se verá en Caracas, sino en las principales ciudades de Venezuela y el mundo entero.
El día mundial sin autos, por lo general se celebra internacionalmente cada 22 de septiembre desde 1990, es un día tan importante para la salud del planeta como lo es el mismísimo día de la tierra o el día del ambiente si lo asumimos con conciencia plena; y qué mejor manera de permitirle un respiro, un suspiro nuestro planeta que haciendo el mayor esfuerzo de bajarnos de nuestros carros y anotarnos en la movida sustentable ya sea caminando, usando el transporte colectivo y/o pedaleando. Este es un día dedicado a generar conciencia sobre el uso responsable del automóvil así como fomentar otros medios de transporte masivos, el uso de la bicicleta e inclusive el caminar.
En Caracas y algunas ciudades de Venezuela como Valencia, Maracaibo, Maracay, entre otras; los grupos y colectivos de ciclistas urbanos estamos trabajando desde hace varias semanas para brindarle la oportunidad a la ciudadanía de abandonar su carro por un día. Es evidente que en una cultura carro-céntrica, como la que aún persevera en nuestro país, si lo celebramos el lunes 22 de septiembre, todos nuestros esfuerzos se verán diluidos, puesto que la falta de políticas públicas en temas de movilidad urbana sustentable son evidentes. Es por esta y otras razones que el día de celebración en nuestro territorio nacional será el Domingo 21 de septiembre de 2014 (), con la rodada más grande que se haya visto en la ciudad, incluso tratando de superar el antecedente del año 2013 en el que participaron más de 400 ciclistas de todo nivel bajo el marco del el cual, vale acotar, este año tiene sede en Valencia para su segunda edición del 06 al 12 de septiembre.
El ciclo-activismo no solo crece rodando la bici, es también un honor informarles que la semana desde 22 al 26 de septiembre en la Universidad Simón Bolívar (U.S.B.) a través de su Centro de Estudio de Movilidad en Bicicleta (CEMBI) tendrá un cronograma de actividades que contemplan: exposiciones, bici-escuelas, firmas de convenios institucionales, presentaciones de proyectos sustentables, entre otras que estarán promoviendo para suministrar información a la colectividad en pro de esta causa.
Ahora bien, si has llegado hasta estas líneas, me parece muy importante que juntos tomemos un tiempo para la reflexión acerca de quienes estamos impulsando un ciclo-activismo en un país donde los carros y las motos tienen el privilegio de las políticas públicas otorgadas por quienes, gracias a la elección popular, deben velar por las verdaderas mayorías; ¿Realmente quienes ejercen el poder ejecutivo en cada nivel de jerarquía, están velando por el colectivo?. Debo decir en este punto de mi retórica, que no es un asunto exclusivo de nuestro país, sino de todos los países del mundo, donde los intereses giran entorno a una industria, a un comercio, a un sistema que ya tiene más de un siglo devastando nuestro planeta, nuestras ciudades y más importante aún nuestra salud individual y colectiva.
En Venezuela, el país de la gasolina más barata del mundo y sus respectivas consecuencias en el desarrollo de sus ciudades y en la idiosincrasia del venezolano en términos de movilidad, el uso de la bicicleta se ha relegado por mucho tiempo a actividades recreativas y deportivas. Incluso en aquellos lugares donde la bicicleta llegó a ser un medio de transporte cotidiano, ésta ha ido perdiendo terreno ante sus competidores a motor. La situación se ve aumentada cuando la bicicleta no es considerada en los planes de desarrollo nacionales y locales y es excluida abiertamente de la infraestructura. Ante esta realidad el uso y promoción de la bicicleta como medio de transporte se convierte en un arduo trabajo que amerita esfuerzos de diversas índoles y a distintos niveles desde lo personal hasta lo masivo a nivel nacional, pasando por la organización colectiva, local y territorial.
Como consecuencia, personas de todo el país abarcando una gran gama de diversidad socio-cultural, estamos generando propuestas individuales y colectivas para devolverle a la bicicleta su justo lugar como medio de transporte. Somos personas que hemos decidido atrevernos a usarla dentro del caos en que se han convertido nuestras ciudades carro-céntricas y la promocionamos buscando generar las condiciones necesarias para facilitar y garantizar la seguridad en su uso; somos individuos que promueven las bondades de la bicicleta a través de su experiencia más que de la teoría y la celebramos como un vehículo de emisión neutra, una máquina que nos alegra y nos ejercita transformando nuestra energía en desplazamiento, que nos lleva a conocer lo que no conocíamos y otras facetas de lo que dábamos por sentado: La ciudad.
Por estas y muchas otras razones, es que hoy he tomado la decisión de llegar a ustedes semanalmente a través de este espacio de opinión donde sé que mis aportes llegan muchas personas con las condiciones necesarias que desean ser parte del cambio positivo, pero que quizás no saben por dónde empezar. Hoy quiero dejarles la información de muchas iniciativas colectivas para la ciudadanía que estaremos difundiendo a través de los espacios organizados como lo es la y cada uno de los grupos organizados en los que militamos activamente, para así darles más argumentos a favor del uso de la bicicleta y dejen las excusas de un lado. Una manera de alcanzar nuestra libertad personal, definitivamente es pedaléandola. .
Finalizo mi intervención con una cita: «Cada vez que se encuentre usted del lado de la mayoría, es tiempo de hacer una pausa y reflexionar» – Mark Twain
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